5.6.08

Nuevos libros de Ediciones de la Intemperie!!!!



No me llamo Laura. Milena Berlatzky.
Poemas para Kamashi, el esclavo de la caldera. Marcos Barberis.
A Eda, por su dulzura. Julián Bejarano.
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Disponible en:
CORREVEIDILE. Libros & arte
La Paz 82. 3100. Paraná
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A continuación, un poco para degustar:
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Las nubes dan la espalda a la lámina de agua

Tres mujeres en una lluvia frente al mar.
Los perros salen del agua antes de haber pensado.
La diosa guarda en su cartera metalizada esferas que espera ver.
Y caigo de lo borracho que estoy, en un campo amarillo.
Quizás mezcle varios frascos trasparentes al principio.
Un hombre estrellado se arma camino a la noche.
El sonido sale de la boca abierta del sol.
La lluvia inquieta espera salir de la forma de un elefante.
El hombre en su soledad espejo del mundo,
tres vacas esperan que la velocidad sea real
y la odisea de la gente que sale a conversar en la vereda.
Una mosca dorada da varias vueltas alrededor de un tomate.
Pero no quiere entrar en su cuerpo pulposo, para no perder
su costado indeciso.
El campo lleno de mariposas, el viento a veces, las empuja del mundo.

Julián Bejarano


Quinqué o Los ácidos sueños


libélulas fluorescentes
malabarear cuchillos sin sueños esponjosos
mariposas incognoscibles prestidigitan caleidoscópicas formas de nubes
el agua cae en gotas concéntricas
llorar en año nuevo no es buen presagio
los herbajes oceánicos olvidan sus flores
los ojos de azul elíptico comienzan a desviarse
se oye un corazón crujir en braille
despertar en el fondo de una cisterna celeste
Alguien golpea la puerta

Silencio
Puede ser la muerte

Milena Berlatzky

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la memoria y el cuerpo se caen de a baldazos,
la distancia de pertenecer, el imaginario que solías
amarrar en las nubes;
¿es así el abismo, el espacio donde nunca se cae?
al suceder la siesta de la torpeza,
abrazas delicadamente al amor,
casi un hormigueo que hace pompas de azúcar impalpable;
un mundo que avanza al galope,
mientras el espinazo del capital te sacude el aire
hasta exiliar de tus pulmones,
y cuando el hilo final llega al reventón, glup!
puedes elegir la pregunta para acunarte más al fondo-hondo-mondo:
¿qué hacer con el aljibe que alzas del balde un deseo vacío?
¿por qué mi mesa ratona se me ha enamorado
del gato de mi vecina cuando cambiaba el neumático
de su rastrogero ‘68?
¿en qué parte entonces de este cachivache
es que vamos amontonando nuestros amores más berretas,
para abanicarnos en tardes donde los trazos han perdido olor?
¿cómo es que en nuestro extravío,
aún no nos hayamos encontrado?

parto;
como globo al desinflar,
que no pretende territorio;

Marcos Barberis